A sus 14 años, Lucía Jirau tiene muy claras sus aspiraciones y metas: continuar con el desarrollo de sus talentos como cantante, bailarina y actriz. Oriunda de Caguas, la multifacética jovencita ya cuenta con una agenda sumamente cargada pues, según comparte, encuentra tiempo para todo. Desde 2015 forma parte del Coro de Niños, y el Coro de Campanas de Caguas, con el cual se ha presentado en un sinnúmero de eventos. En 2016 comenzó a tomar clases de Teoría, Solfeo y Técnica Vocal en la Escuela Libre de Música de Caguas, y ese mismo año debutó como actriz en las obras: “Misterio en el palacio”, y “Los sorditos a caballito de palo”. Además, forma parte del Grupo de Baile Folclórico de Caguas y del Grupo de Baile Acción Social de Caguas. Como si fuera poco, en octubre de 2015 fue seleccionada entre cinco mil niños de Puerto Rico y Estados Unidos para ser parte de los cien niños que irían a las audiciones de La Voz Kids 2016 en Florida. Aunque no fue seleccionada, recibió numerosos elogios por parte de los jueces y vivió una experiencia única que le motivó a continuar su desarrollo musical. Apenas le sobra el tiempo, pero Lucía siempre encuentra la manera de sobresalir en sus estudios. En mayo de 2018 recibió el premio “La Escalera”, galardón que se otorga a estudiantes con excelencia académica, liderazgo y compromiso social. Este año recibió la Medalla de Liderazgo en sus actos de graduación por parte del Municipio Autónomo de Caguas. Actualmente, trabaja para completar su primer disco. Su madre, quien funge como su guía en esta hermosa trayectoria, es quien le ayuda a componer temas, cuatro de los que ya están disponibles en todas las plataformas musicales. La alegre joven sueña con que algún día sus canciones se escuchen en la radio y, sobre todo, con la oportunidad de llevar un mensaje de alegría y motivación. A continuación, la entrevista que le hicimos a Lucía en su versión editada y condensada. GDE: Lucía, ¿cuándo te diste cuenta de que te gustaba la música? LJ: Desde que era chiquita. Mi mamá cantaba en actividades privadas y yo iba con ella y me gustaba mucho lo que hacía. GDE: ¿Qué te gusta escuchar y quiénes son tus músicos favoritos? LJ: Mi cantante favorita es Ariana Grande porque tiene diferentes tipos de música y me gusta mucho. GDE: ¿O sea que te inclinas por la música pop? LJ: Sí. GDE: También bailas y actúas, ¿qué otros talentos quisieras cultivar? LJ: Me gustaría continuar con la actuación y el baile, específicamente el hip-hop la bomba y la plena, pero lo más que me gusta es la bomba. GDE: ¿Qué deseas transmitir con tu música? ¿Qué tipo de artista quieres ser? LJ: Me gustaría trabajar distintos géneros como pop, baladas y salsa y siempre transmitir un buen mensaje. Que las canciones tengan una buena base, un buen mensaje y usar cosas que pasan en la vida real para que la gente se identifique, ya sea algo que me pasó a mí o a otras personas. GDE: Háblame de la historia detrás de una de tus canciones. LJ: “Aquí estoy” está dedicada a esos padres que a veces no escuchan a sus hijos. El punto de esa canción es llegar a tocar a esos padres para que dejen a sus hijos ser ellos y permitan que puedan cumplir sus sueños y metas, obviamente con su apoyo. GDE: Entiendo que siempre cuentas con el apoyo de tu familia. LJ: Sí, sinceramente con el de toda mi familia. GDE: ¿Cómo te sentiste la primera vez que subiste a una tarima a cantarle a un público? LJ: No recuerdo la primera vez, pero creo que fue cuando era chiquita porque no me daba miedo; si tenía el antojo de cantar, cantaba. Ahora siempre me pongo nerviosa antes de cantar. GDE: ¿Qué haces para calmar los nervios antes de subir a un escenario? LJ: Antes de presentarme oro y vocalizo un poco; practico la canción varias veces. GDE: ¿Recuerdas alguna experiencia en la que te haya pasado algo bien bonito en una de tus presentaciones? LJ: Tuve una presentación para cantar en la actividad de Aniversario del Voluntariado Criollo y el alcalde de Caguas les dijo a los organizadores de la actividad que no me dejaran cantar hasta que él llegara; fue un feeling bien lindo. En otra presentación para la inauguración de un restaurante mexicano aquí en Caguas fue igual; pidió que no cantara antes de que él llegara. GDE: De manera que también tienes el apoyo de tu pueblo… LJ: Sí, sí, es un feeling bien lindo. GDE: ¿Cómo fue la experiencia en La Voz Kids? LJ: Para mí, ser escogida entre cinco mil personas que audicionaron… wow, fue grande. Mi familia y yo lo celebramos mucho. De verdad fue una experiencia bien linda y conocí mucha gente buena. Aunque no me seleccionaron fui una entre los cien que escogieron y me sentí parte de eso, una ganadora. GDE: ¿En qué proyectos trabajas? LJ: Estoy en Acción Social de Caguas, un grupo de baile con el que vamos a muchas actividades en comunidades, hogares de niños, y a veces hacemos canciones que yo canto y los demás bailan. También estoy en la Escuela Libre de Música de Caguas cogiendo clases de canto, pertenezco al Coro de Niños y el Coro de Campanas del municipio de Caguas, y al Taller de Baile Folklórico del municipio de Caguas. GDE: ¿Cómo divides tu tiempo para hacer todo eso y además estudiar y sacar buenas notas? LJ: Pienso que tengo tiempo para todo. En el fin de semana hago mis asignaciones y en el poco tiempo que tengo en la semana también. Siempre tengo un poquito de tiempo para dedicarle a todo. GDE: Además trabajas para lanzar tu primer disco. LJ: Ya tengo cuatro temas y ahora vamos a trabajar el vídeo de mi nueva canción que se llama “Desconectada” para lanzarlo en YouTube. Las cuatro canciones ya están en todas las plataformas musicales. La Ñapita: Descríbete con tres palabras: espontánea, amable y divertida Un libro o disco que te haya influenciado: el disco “Yours Truly” de Ariana Grande ¿Cómo se llamaría la película de tu vida? “Una chica diferente” Un puertorriqueñ@ que admires: JLo y Daddy Yankee Quisieras aprender a: hablar francés ¿Qué te inspira? Mi mamá, Rebeca Jiménez Molina, que todos los días me da su apoyo, me ayuda y me da consejos. Quisieras que te recordaran por: mi espontaneidad Sigue a Lucía en las redes sociales: Facebook: @luciajirau Instagram: @luciajirau YouTube: Lucía V. Jirau
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Andrea Cruz recuerda que desde pequeña su oído siempre captaba la música, sonidos y ritmos en su entorno. Ir al cine significaba prestarle mayor atención a la música de fondo que a la trama de la película. Estas experiencias, muy suyas, le dejaron saber a temprana edad que debía hacer caso a sus inclinaciones musicales. Cruz se lanzó oficialmente al mundo de la música en 2014. La oriunda del pueblo de las flores se describe como cantautora y jíbara puertorriqueña, y su sonido, acompañado por la guitarra, combina géneros como el: folclórico independiente con influencias anglosajonas, en las cuales permean los arreglos musicales arraigados a sus inclinaciones y raíces. Su primer disco “Tejido de Laurel” se acomodó entre las posiciones más destacadas de los listados locales de música. Esta producción le abrió grandes puertas como la participación en el reconocido festival SXSW en Austin, Texas, así como la presentación de su primer concierto en Puerto Rico. Como si fuera poco, en 2019 fue telonera del concierto de Kany García “Soy Yo” en el Coliseo de Puerto Rico, y formó parte del catálogo de Tiny Desk Concert Series de NPR Music en Washington, DC. Actualmente, Andrea se encuentra en la producción de su segundo álbum, con el que desea llevar su propuesta fuera de Puerto Rico. A continuación, la entrevista que le hicimos a Andrea en su versión editada y condensada. GDE: Previo a tu lanzamiento oficial en 2014, ¿cómo te iniciaste en el mundo de la música? AC: Mi mamá fue quién empezó a notar esa particularidad en mí, dentro y fuera de la escuela, en espacios recreativos, grupos de teatro y diferentes tipos de cosas que me gustaban. Ella notó que había una inclinación hacia la música. Cuando iba al cine yo tenía un contacto más allá con lo que pasaba sonoramente y no visualmente, y esa era una experiencia muy mía y siempre la tenía en mente. Además, cuando íbamos a lugares como restaurantes, veía que me interesaba escuchar a la persona que tocaba la guitarra y no necesariamente estar en la mesa con mi familia. Me sentaba al frente, miraba la guitarra, los dedos de quien la tocaba… Luego, una maestra de música en la escuela le dijo a mi mamá que entendía que había algo particular. Empecé a desarrollar el canto en la escuela, en los coros, pero nunca pude estudiar música formalmente. GDE: En tus comienzos usabas el seudónimo de Amapola, ¿por qué? AC: Siempre me encantaba el tema clásico de “Amapola”. La primera vez lo escuché de Gaby Moreno que hizo un cover. Siempre les decía a mis compañeros: “si en algún momento tengo una banda o algo, le voy a poner Amapola.” Se dio la oportunidad de tener esa banda con mis vecinos, que eran los que tocaban conmigo y empecé a tocar en diferentes lugares en Puerto Rico con el seudónimo de Amapola. A la gente le gustaba y llamaba la atención. Tocaba varias canciones mías y varios covers hasta que en La Respuesta hubo un evento en el que se presentó la banda local Polem, a la que le abrí el concierto. Allí había ciertas personas a quienes les interesó el proyecto. En ese momento hacía falta una seriedad y dije: “bueno, hay que soltar el nombre y darle firmeza a esto con el mío.” GDE: ¿Cómo es tu proceso creativo al componer? AC: Es muy silencioso. Se llena de mucha lectura y también de muchas cosas visuales; la lectura y el silencio son bien importantes para mí. GDE: ¿Qué intentas transmitir con tu música? AC: Acompañar en momentos de crisis, dolor, duelo y de nuestro diario en sí, ya que el mundo y la vida misma es difícil, no se entiende. En mi caso la música busca crear una imagen diferente. Que la gente pueda realmente desear otro estilo de vida, otra cosa, y salirse un momento de esa cotidianidad para enfrentarse con esos deseos que todos y todas tenemos, que en ocasiones son frustraciones, traumas, que otras veces son buenas. Busca acompañar ese tipo sensación. GDE: Mientras crecías, ¿qué te gustaba escuchar? ¿Quiénes eran tus músicos favoritos? AC: Tengo un recuerdo de Ana Gabriel, me encantaba, mi tía la ponía y me volvía loca. A mí me encanta mucho y está muy presente el merengue, es bien loco, pero está bien presente; me encantaba Milly Quezada. También, Haciendo Punto en Otro Son, Tony Croatto, esa música más típica. Había un poquito de todo. Ya después de los 15 años fue que viene escuchar a Mercedes Sosa, Violeta Parra y enamorarme de esa poesía y de esa denuncia y narrativa que hacían a través de la música. GDE: ¿Algún artista con el te gustaría colaborar? AC: Ay sí, hay tantos en la lista: el cantautor chileno Nano Stern; el cantautor argentino Lisandro Aristimuño; Kany García que es un amor; los mexicanos Silvana Estrada y David Aguilar… Hay muchos cantautores, propuestas y proyectos que me llaman mucho. GDE: Estás próxima a lanzar tu segundo álbum ¿alguna idea de cuándo? AC: En febrero. GDE: ¿En qué proyectos nuevos trabajas? AC: Actualmente todo el enfoque y toda la intención va para este segundo álbum. Esta vez no solo lo vamos a mover aquí en Puerto Rico. También vamos a empezar a expandir el proyecto en países como México, Colombia, España y en diferentes estados de los Estados Unidos. Ese es el enfoque ahora. Queremos hacer ese salto ya. La Ñapita: Descríbete con tres palabras: dominante, comprometida y amable Un libro o disco que te haya influenciado: Ahora mismo el disco “Lo Azul Sobre Mí” de Loli Molina; no paro de escucharlo. Una frase o cita, tuya o de otra persona, que te gusta mucho: “El pájaro no canta porque tenga una afirmación que hacer. Canta porque tiene un canto que expresar,” de Anthony De Mello. ¿Cuál es un hábito poco usual o manía que tienes? Sacar la libreta siempre que voy a comer o algo así; es una manía. En años recientes, ¿qué nueva creencia, comportamiento o práctica mejoró considerablemente tu vida? No sustituir viejas verdades absolutas por nuevas verdades absolutas. ¿Cómo se llamaría la película de tu vida? “Una vida digna para todas y todos” Un puertorriqueñ@ que admires: Tania Rosario de Taller Salud, la amo. Quisieras aprender a: tocar cello ¿Qué te inspira? La esperanza de que otras generaciones puedan vivir en una realidad transformada, mejor, más suave o por lo menos que tengan un camino más liviano. Quisieras que te recordaran por: que fui honesta Sigue a Andrea en las redes sociales: www.andreacruzmusica.com Facebook: @andreacruzmusica Instagram: @andreacruzmusica Mientras estudiaba arte en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, la artista Cristina Muñoz Laboy descubrió un tema que no solo le apasiona, sino que le sirve como herramienta de educación: las flores de Puerto Rico en peligro de extinción. De esta pasión nació su proyecto: Flora pa’l corazón. Poco a poco su pasión se convirtió en un sentido de responsabilidad, pues a la también maestra de arte le gustaría crear un proyecto que combine su propuesta artística con la educación, tanto para niños y adultos. Esta idea con la intención de inculcarles la responsabilidad y compromiso con la preservación de nuestra naturaleza. Para Cristina, su proyecto artístico es su voz, una herramienta clave en este proceso. La joven de 25 años y oriunda de San Lorenzo, tiene claro lo que la mueve: los temas relacionados con la naturaleza y su conservación. El pasado mes de octubre celebró su primera exposición de arte con el proyecto, y a través de San Juan y áreas limítrofes pueden apreciarse sus murales de coloridas flores. A continuación, la entrevista que le hicimos a Cristina en su versión editada y condensada. GDE: Cristina, ¿cuándo decidiste que serías artista? CML: Básicamente, en el transcurso de high school cuando buscaba qué estudiar, sabía que quería estudiar algo creativo, pero no estaba segura si inclinarme por arte en general y me decidí por diseño de modas. Cuando estudié diseño de modas en la Universidad del Turabo y empecé costura, no me gustó. Me encantaban las clases de diseño porque era poner la creatividad a la séptima potencia, pero la costura no y me di de baja. Ahí fue que dije que tenía que estudiar arte porque desde pequeña me gustaban las tareas que tuviesen que ver con recortar, pegar, que si los poemas concretos, buscar imágenes, así que ingresé a la IUPI y por dos años trabajé flores en general. Luego fue que nació el proyecto Flora pa’l corazón. GDE: ¿Cómo nació esa inquietud por pintar flores? CML: En una ocasión tuve la oportunidad de restaurarle un oso de madera a una muchacha que era hija de la dueña de una floristería. Cuando fui a entregárselo me encontré con la pared del estacionamiento: grande, blanca y perfecta. Les pedí que me dejaran pintar un mural y como era una floristería, pues obviamente serían flores. Entonces me gustó mucho la dinámica de trabajar flores porque me pareció bello la diversidad que hay entre las plantas y los colores. Empecé a dibujar muchas flores por mi cuenta y dejé de hacer retratos y demás. Me enfoqué mucho más en las plantas, que al principio eran solamente girasoles y lirios, lo más básico. GDE: Uno de los propósitos de tu proyecto Flora pa’l corazón es educar, háblame un poquito del proyecto y qué buscas transmitir a través de estas obras. CML: Flora pa’l corazón nació en marzo de 2017 luego de una exposición que hice de flores generales, pues el feedback que recibí fue muy bueno. Quería hacer una propuesta de arte que tuviese un propósito, que me empujara a educarme fuera de lo que eran técnicas de arte que aprendía en la universidad. Quería hacer algo que me moviera el espacio y que en el transcurso la gente también se pudiera mover conmigo. Me encanta ver todo lo relacionado a la conservación del ambiente, del cambio climático, porque me parece que es sumamente pertinente. Entonces me surgió la pregunta de si en Puerto Rico había flores en peligro de extinción; encontré que había más flores que animales. Comencé a investigar y nació el proyecto. Le puse Flora pa’l corazón porque es algo que decimos mucho, que si te amo con todo mi corazón o lo hago con el corazón es algo que haces con pasión y cuidado. Aunque eventualmente tal vez deje de pintar flores y quizás me mueva a otras ramas que tengan que ver con la conservación, todo nació desde las flores y pues siempre es con el corazón y por la naturaleza. De manera que este proyecto me empodera de muchas maneras, me sirve de inspiración y para conectar con la gente y llevar un mensaje claro de que hay que conservar la naturaleza. GDE: En tu proceso de investigación, ¿cuáles son algunas de nuestras flores que están en peligro de extinción? CML: Hay tres que utilizo mucho. Primero porque son de las más que me gustan y tuve la oportunidad de verlas. Hay una que se llama Goetzea elegans, que normalmente se conoce como Matabuey. Es una florcita pequeñita, amarilla, y tuve la oportunidad de verla en persona en el Parque Doña Inés en Trujillo Alto. En ese parque conservan muchos árboles que se encuentran en estado de amenaza. Otra flor es el palo de nigua, de color violeta y esa me encanta. Hay otra que se llama diablito de tres cuernos, es gracioso porque literalmente la plantita tiene como unos cuernitos. Es simplemente verde, pero tiene algo súper bello y aunque tal vez esas no sean flores de por sí, visualmente me son curiosas. Así que con este proyecto descubrí que realmente la diversidad en las plantas es gigante y también que son plantas de aquí, que a veces uno no tiene acceso a esa información. GDE: ¿Tiene más planes con Flora pa’l corazón? CML: De por sí trabajo para una organización sin fines de lucro como maestra de arte y me di cuenta que estos temas no se tocan directamente en las escuelas, tal vez de animales en peligro de extinción, pero no necesariamente de plantas. Me gustaría crear algo que pueda incluir la educación para los niños que tal vez si conocen estas cosas de pequeños, cuando crezcan van a ser más responsables y comprometidos. Definitivamente también quiero seguir buscando la manera de conectar con adultos, ya sea a través de talleres o experiencias creativas y conversatorios, para que de eso surja también la inquietud de crear otro tipo de proyectos o colaboraciones para seguir manejando este tema que realmente me parece necesario. También, seguir pintando donde la vida me permita para que el mensaje llegue. Para mí, más que un proyecto científico es uno artístico y creo que la mejor herramienta que puedo usar ahora mismo es mi trabajo de arte, que es mi voz. Además, trabajé una colaboración de camisas con Siempre Tropi. Tenemos cuatro diseños y nos falta el último que debe estar listo próximamente para cerrar esa minicolección. Incluso cuando terminemos de lanzar el último diseño, si la gente quiere pedir un diseño lo podrá hacer; se trabajará por pedidos. Están disponibles a través de mi IG: florapalcorazón o en la de siempretropi; en cualquiera de las dos. También pienso lanzar los diseños de Flora en otro tipo de artículos como botellas o tazas reusables. GDE: ¿Dónde las personas pueden ver tu arte? CML: Que estén accesibles, en El Vagón en Santurce; hay un mural en la Avenida Sagrado Corazón en Santurce; hay un mural detrás del cementerio en La Perla en el Viejo San Juan, y hay otro proyecto que realmente no es un mural, pero pinté los gazebos de la Playa El Cocal en Yabucoa. Esa propuesta estuvo súper cool pues fue diferente establecer las flores en un espacio completamente natural. GDE: Además de flores, ¿qué otro tema te apasiona a la hora pintar? CML: Últimamente uso mucho una paleta de colores mucho más amplia. Antes me enfocaba solamente en el blanco y negro. Me encanta dibujar las flores, sin embargo, trato de explorar un poco más lo que son los fondos abstractos para mezclarlos con los conceptos literales de la naturaleza. Pero básicamente quiero seguirme moviendo dentro de la naturaleza. Ahora mismo lo más que disfruto son las plantas, pero sí me gustaría poco a poco ir buscando qué puede ser lo próximo en unos años sin salirme de la línea de la conservación y la naturaleza; definitivamente es ahí donde tengo que estar. GDE: ¿Qué otros proyectos tienes? CML: Para el primer semestre del 2020 quiero trabajar otro tipo de presentación que nos conecte más a nuestras madres y abuelas, que son las que normalmente nos traen este amor por las plantas. La Ñapita: Descríbete con tres palabras: una mujer arriesgada, segura y capaz. Un libro o disco que te haya influenciado: mi disco favorito es de mi artista favorito Bon Iver. El disco se llama “Bon Iver, Bon Iver”. Desde la carátula hasta la música completa me inspira enormemente. Lo uso mucho a la hora de pintar. Puedo estar molesta y me ayuda; puedo estar feliz y también. Hay algo que me transmite que es bien poderoso. Una frase o cita, tuya o de otra persona, que te gusta mucho: Es de Frida Kahlo: “Pies para que los quiero si tengo alas para volar”; la descubrí hace mucho tiempo, pero siempre me ha encantado. En años recientes, ¿qué nueva creencia, comportamiento o práctica mejoró considerablemente tu vida? Antes no solía levantarme temprano, era más night person. De repente descubrí la magia que hay en levantarme temprano y poder ser productiva, disfrutar mi café y tener como un espacio de soledad, aunque haya gente en la casa. Es una práctica mañanera que me ayuda a manejar mejor el día. Cuando sientes que pierdes el enfoque o la inspiración temporeramente, ¿qué haces? Lo que me funciona es conectar mucho con amistades que tal vez han visto mis procesos. Hablar con la gente y dejarles saber que estoy bloqueada. Soy bien habladora y realmente en momentos así, que realmente necesito ayuda, la pido y me ayuda a conectar con gente que le añade mucho a mi vida. Un puertorriqueñ@ que admires: podría mencionar un montón de personas, pero ahora mismo una de mis más grandes amigas, Andrea Cruz, empezó a cantar hace varios años y todo empezó así, como bien inusual. Siento que ahora mismo en la escena independiente de Puerto Rico ella le mete bien heavy. Nos damos apoyo, ella desde su rama de música y yo desde el arte y podemos experimentar cosas bien distintas, pero me di cuenta con ella lo bello que es fajarse por lo de uno, parir las cosas con el esfuerzo propio y reconocer que el arte es una herramienta muy sanadora. Fuera de nuestra relación de amistad y demás, la admiro porque se tira de pecho contra todo. Quisieras aprender a: esto es una locura, pero en verdad quiero aprender a cocinar bien rico porque soy malísima. De verdad me encantaría, pero no le encuentro el amor… ¿Qué es una de las cosas más gratificantes que has hecho? Trabajar en el Boys & Girls Club porque me permite trabajar experiencias creativas con otras personas en un espacio que me permite llegar a niños y jóvenes que tienen una necesidad. Un poco más allá de requerir el apoyo escolar, obviamente son niños que tienen una necesidad de afecto, de atención, etcétera. Cuando uno regala, realmente uno recibe tantas cosas que no son económicas. No pensaba que podía tener paciencia con los niños y realmente me di cuenta que no es paciencia lo que uno necesita, es empatía y amor. Creo que una de las cosas más gratificantes fue toparme con esa organización y estar ahí y permanecer porque el lugar que uno cumple para ellos es bien importante. Estar en ese trabajo me mueve de mil maneras bien lindas. ¿Qué te inspira? La naturaleza, la gente fajona, escuchar historias de éxito y de gente que tal vez se las vio bien fea para arrancar algo y de repente ahora está súper bien y haciendo lo que les gusta. Más que todo me inspira la gente que hace lo que realmente les gusta. Eso me vuela la cabeza. Quisieras que te recordaran por: ser una persona empática que utilizó la herramienta del arte como una voz para amar y educar. Sigue a Cristina en las redes sociales: Facebook: Flora pa’l corazón Instagram: florapalcorazón |
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Diciembre 2020
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