Javier De Jesús es un hombre sumamente carismático y versátil, y detrás de su eterna sonrisa reside un ser a quien la vida confrontó con inmensos retos que lo equiparon con las herramientas necesarias para cada día convertirse en su mejor versión. A sus 47 años, Javier, además de ser fisiculturista, actor, escritor, “Machazo” y Life Coach, es un Youtuber que se dedica a motivar a sus más de 27,000 seguidores a través de mensajes salpicados de positivismo y humor. A continuación, la entrevista que le hicimos a Javier en su versión editada y condensada. GDE: Hola Javier, qué gusto hablarte luego de tanto tiempo. Oye, entre todas las cosas para las que te has preparado, me pareció curioso que también estudiaste para ser Life Coach, ¿por qué? JDJ: Pues mira, lo estudié para beneficio personal porque me gustaba el tema, dentro de la motivación, de las personas que te ayudan a sacar lo mejor de ti y te obligan a encontrar respuestas. Eso precisamente es lo que hace el Life Coach a través de preguntas, te lleva a que sepas qué quieres y luego va mano a mano contigo hasta que lo logras. Entonces, quería saber cómo podía aplicar eso a mi vida para hacerme las preguntas correctas. De ahí lo apliqué a mis charlas de motivación y a las cosas que hago, para llevar un mejor mensaje sin entrar en mi opinión dentro de lo que pueda querer o no para otras personas. Básicamente por eso lo estudié y me encantó, se lo recomiendo a cualquiera. Tuve la oportunidad de trabajar con dos compañías que me contrataron para hacerle coaching a los gerenciales y empleados que eran líderes de distintas áreas; fue chulísimo. GDE: ¿Cuánto tiempo tomó esa preparación? JDJ: Lo mío fue súper rápido porque estudié más de 10 religiones, filosofía… es una pasión. Hubo muchos años de mi vida en que prácticamente era adicto a la lectura y me gustaba todo lo que tenía que ver con lo espiritual, con psicología, y cuando empecé a estudiar Life Coach, que fue en The International School of Coaching y la sede de ellos está en España, empecé a estudiar directamente con un profesor por Skype. Me gustó mucho porque él era la persona a quien le tenía que hacer coaching. Fue bastante rápido por lo que yo había estudiado y en nueve meses lo terminé, eso fue en el 2008. GDE: También eres fisiculturista desde hace tiempo, ¿cuándo fue que empezaste a prepararte para competir? ¿Qué trajo a tu vida toda esa preparación física como competidor de fisiculturismo? JDJ: Mi primera competencia fue en 1994, lo que pasa es que nunca lo decía mediáticamente porque como competí en Puerto Rico no quería que nadie pensara que tenía una influencia mediática en las decisiones de los jueces. Entonces me exigía mucho más porque no quería ganar y que fuera dudoso. Me pasó muchas veces que la gente decía: ganó porque es Javier, porque es “el Machazo”… a pesar de que empecé a competir antes de estar en televisión. Gané cinco años corridos en Puerto Rico, de 2006 a 2010, y luego me retiré por un tiempo. Regresé después de muchas cosas trágicas que me pasaron y ahí creo que te voy a contestar exactamente cómo afectó mi vida. En un momento dado me dio una depresión brutal, no quería trabajar, me llamaban para charlas y decía que la fecha estaba cogida pero estaba en mi casa encerrado. Un amigo me dijo: mira, empieza en el gimnasio de nuevo, y empecé. Ya me había retirado para correr bicicleta porque me había lastimado un hombro y los médicos decían que en cualquier momento se iba a romper el tendón. Regresé en el 2014 y poco a poco hice competencias nacionales. Representé a Puerto Rico en los Centroamericanos y me lancé a competir en Estados Unidos porque quería hacerlo donde nadie me conociera. Gané competencias regionales y después nacionales. En el 2017 competí Open con chamacos de 23 y 24 años y llegué top ten. Soy el único puertorriqueño en llegar top ten en mi categoría a nivel profesional, pero fue bien difícil. ¿Cómo cambió mi vida? Creo que todo lo que he hecho en mi vida está ligado a ese deporte porque no creo que haya otra cosa tan sacrificada en términos generales de vida; tienes que dormir las horas que tienes que dormir, si sales tienes que llevar tu comida, puedes estar en el lobby del Hotel San Juan y sacar tu comida y comer porque te toca. Tienes que entrenar toda tu vida, sacrificar tiempo con amistades, con familia. Entonces la disciplina es tanta que cuando puedes aplicar eso a otras cosas en tu vida, lo logras. La consistencia no se logra en dos días, a mi me tomó años. Llevo 32 años entrenando y eso me ayuda a que cada vez que empiezo algún proyecto, no me precipito ni desespero. Tengo un arma bien poderosa y es que no me voy a rendir y entonces no pierdo, porque mientras luchas no pierdes, o ganas o sigues luchando. Entonces en ese sentido mi vida cambió porque la disciplina la pude aplicar. De hecho, cuando tuve un aha moment fue por Rich Gaspari, un competidor de Estados Unidos que llegó cuatro veces segundo lugar en Mister Olympia. Él cambió el deporte, su condición era la mejor pero por su físico siempre perdía, no se veía bonito en tarima. Entonces montó una compañía de suplementos y en ese momento no tenía mucho dinero. Le dijeron: estás montando una compañía pero vas a competir con otras más grandes que te van a comer, ¿qué te hace pensar que vas a tener éxito? Su contestación fue: fui segundo lugar cuatro veces en Mister Olympia, no hay nada que no pueda lograr. Cuando lo escuché dije: es verdad, a nosotros nadie nos entiende, nadie te aplaude, lo que hacen es criticar hasta que ganes. Incluso cuando mejor te ves siempre hay alguien que dice: estás muy fuerte, me das asco. Es uno contra el mundo. Es bien complicado y creo que cuando aplico eso a las cosas que quiero lograr digo: esto es un reto más, igual que lo que hecho toda mi vida. GDE: ¿Cómo te mantienes saludable? JDJ: Como estoy con miras a regresar el año que viene a competir una o dos veces para luego retirarme, como cada dos horas y media y todo es pesado y medido. Quiero estar seguro de cuántos gramos de proteína, de carbohidratos y de grasa uso. Básicamente, mi comida es muy aburrida: todos los días como avena, pechuga de pollo, pescado, carne roja súper limpia, arroz blanco, batata mameya y ensalada verde como brócoli, espinaca o espárragos. Entreno de lunes a viernes por una hora y 15 minutos incluido el cardio por 30 minutos; por la noche camino media hora por la calle. GDE: ¿No te das un gustito de vez en cuando? JDJ: Ahora mismo que estoy en off season hago unos videos de comida para mi canal de YouTube donde salgo a comer en restaurantes en Puerto Rico y entonces el día que hago ese video como como salvaje. Antes de hacer el video me mantengo consumiendo proteína. Luego calculo y entonces los próximos días empiezo a bajar en los nutrientes, todo es medido. La gente dice: pero como ese tipo come así, y no es que después como menos, como menos de lo que tengo que comer menos. GDE: Javier, ¿de dónde sacaste la fortaleza luego de la pérdida de tus padres y luego la de tu hermano? JDJ: Estaba en Pittsburgh compitiendo para hacerme profesional, iba montado en un taxi y en ese momento vino una de esas cosas que a nivel espiritual llamo revelación. Algo dentro de mi me dijo: Javier, esto fue así por esta razón. Y me di cuenta en ese momento, y se lo dije al taxista porque tenía que decírselo a alguien, de que todas las cosas que pasaron en mi vida, por más fuerte que fueron, nunca pasó una más fuerte antes. Me explico, cuando pasó lo de mi mamá que estaba enferma con cáncer, recibir esa noticia fue muy fuerte y más cuando nadie lo sabía, solo mi mamá y yo. Así pasaron muchos meses porque mami no quería que nadie supiera nada. Ya eso te empieza a fortalecer y a preparar. Entonces cuando murió, eso me fortaleció. Tú pasas por procesos fuertes y te fortaleces. Luego vino la muerte de mi papá, que yo no lo quería menos que mami, de hecho, mi papá era mi ídolo, para mí era lo más grande. Pues mi papá no estaba enfermo, se operó del corazón y salió bien. Parece que comió mucho la noche anterior y se acostó a dormir y le dio un paro cardíaco. Eso hubiese sido 10 veces más fuerte si hubiera pasado antes que lo de mi mamá, porque un proceso me hizo más fuerte para el siguiente. Entonces cuando pasó lo segundo empecé a lidiar con un sentimiento de que me sentía solo, a pesar de que yo no vivía con mis papás, ni hablaba con ellos todos los días, pero tú sabes que están ahí. Cuando pasó lo de mi hermano Gillito, yo no lo hubiese podido soportar si hubiese pasado primero que los otros dos. Ya yo no era la misma persona. Empecé a aprender que nosotros sufrimos por nuestra manera natural de ser egoístas, de decir: me va a hacer falta, no lo voy a ver. Si pienso en la persona, si cambio el enfoque es más fácil porque digo: esta persona estaba en un cuerpo, en un plano físico donde hay dolor, sufrimiento, enfermedades, angustia. Entonces una vez veo las cosas desde ese punto de vista se me hace menos difícil pasar por el proceso. Ahora, no te puedo decir que superé todo, creo que es un trabajo diario. Es muy difícil para mí ver cosas de mi hermano y que de momento se me aguan los ojos; uno aprende a vivir con eso. Además, no es lo mismo cuando daba charlas de motivación antes que cuando las doy ahora, la gente dice: el tipo tiene credibilidad… Yo di 17 charlas a pacientes de cáncer terminal en tres semanas y la primera fue el día después de que mi mamá murió; estaba delante de esos pacientes que se enteraron por los medios. Tenía que estar allí haciéndoles ver que todo iba a estar bien. Esas cosas te convierten en otra persona. GDE: Partiendo de esa premisa, ¿qué consejos puedes compartir para, al igual que tú, vencer cualquier adversidad y lograr nuestras metas? JDJ: Todo está en cómo miras lo que te sucede. Cuando quiero adquirir fuerzas o desarrollar más un área muscular tengo que entrenar más fuerte y ser más disciplinado. En la medida en que yo pueda mover más eso, voy a seguir ganando fuerzas porque el cuerpo pasa por un proceso de adaptación. No puedo controlar si voy a subir unas pesas una vez las bajo, pero sí puedo controlar el dar el 100 por ciento de mi esfuerzo y mientras lo haga, independientemente del resultado, mi cuerpo siempre va a asumir una actitud de adaptación. Cuando nosotros pasamos por adversidades, es exactamente lo mismo, es algo que va en contra de nosotros pero que precisamente es lo que nos hará subir a un próximo nivel. Es maravilloso pensar en una vida sin adversidades, pero si fuera de esa manera tampoco progresaríamos porque no hay nada que tengas en contra para que te esfuerces a ser mejor. Las adversidades y los obstáculos, cuando hablamos desde el punto de vista profesional o de metas que queremos lograr, son los que te obligan a hacerte la pregunta de cuán grande es tu deseo por lograrlo. Cuando tu deseo no es tan grande, la adversidad siempre va a ganar la batalla. Cuando tu deseo es más grande, tú vas por encima de la adversidad. Estoy totalmente convencido de que las adversidades son las que te preparan para asumir una actitud de humildad ante tus logros. Te conviertes en una persona grandiosa cuando tienes esa adversidad y aceptas que lo que te encuentres de frente es lo que te hará crecer. Cuando me preguntan quién es mi héroe, mi héroe soy yo dentro de cinco años y cuando pasen los cinco años va a ser lo mismo porque me quiero convertir en esa persona que quiero admirar. Eso no va a pasar si no tengo nada en contra. Compito Open en Estados Unidos con gente mucho más dura que yo, mucho más joven, pero es que eso es lo que quiero. De ninguna otra manera voy a lograr sentirme orgulloso y decir: di mi 100 por ciento. GDE: Dices que eres creyente del poder espiritual, háblame de eso y de si tienes alguna práctica espiritual. JDJ: Estoy pecando de que no estoy meditando. Me levantaba todos los días y meditaba y eso me ayudó mucho. Actualmente, cada vez que tengo proyectos nuevos practico estar solo conmigo, conversaciones conmigo, con mi conciencia. Estoy bien seguro de que hay un poder mucho más grande que nosotros que está presente todo el tiempo y al que llamo Dios. Estoy seguro de que cuando uno tiene esa relación de hablar con ese ser espiritual, uno empieza a tener respuestas si tienes la paciencia necesaria para escucharlas. Pues tengo esas conversaciones en las que me pregunto si estaré en el camino correcto y usualmente la contestación es si te sientes feliz sí, si te sientes mal pues no estás ahí. Es algo que le recomiendo a todo el mundo, que saquen un tiempito porque quien no puede estar solo no va a lograr que alguien quiera estar solo con él. GDE: ¿Quiénes te sirvieron de inspiración durante tu carrera profesional? JDJ: Mi papá, Gilberto De Jesús, me enseñó muchas cosas en términos de asumir responsabilidades. No era un tipo que no cometió errores, pero siempre los afrontó. Era un hombre de palabra. Por él nunca he llegado tarde a un sitio, porque él decía: Javier, no se puede llegar tarde. Por mi papá nunca he prometido algo que no haya cumplido. Antes de prometer algo lo pienso mucho porque sé que me voy a atar con eso. Mi papá decía que la palabra de uno tiene que valer más que la firma de cualquier abogado. Me enseñó muchas cosas, no a ser fiel sino a ser leal. Cuando llegué del hospital dos días antes de que mi mamá muriera, lo llamé y le pregunté: ¿cómo éstas? Te siento triste y no tienes por qué estarlo, desde que te enteraste de que mami tenía cáncer renunciaste a todo, estuviste a su lado todo el tiempo. Entonces me dijo: Javier, eso no es nada por lo que me tenga que sentir orgulloso porque cuando en la iglesia yo le prometí a un cura que iba a estar con tu mamá en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte nos separe, lo único que hice fue cumplir con mi responsabilidad. No merezco ningún tipo de mérito porque hice lo que se supone. Bueno es aquel que hace algo más de lo que se supone. Entonces eso me jamaqueó y dije: quiero ser como él. GDE: Hablemos de tu canal de YouTube que hoy sobrepasa los 27,000 seguidores, ¿cuál es tu misión e intención con el canal? JDJ: Empecé con YouTube cuando me di cuenta de que poco a poco la televisión está desintegrándose. Hace unos meses YouTube sobrepasó la televisión a nivel mundial en ventas de anuncios. También me di cuenta de que personas que querían entrar a los medios de comunicación o demostrar que tenían algún talento, tenían una plataforma completamente gratis para hacerlo. Inicié el canal en el 2007 y primero hacía videos de motivación y autoayuda, que los veo ahora y digo: Dios mío, pero qué vergüenza… No usé más el canal y entonces empecé duro en el 2017, a hacer tres videos semanales y luego cuatro. Después vino el huracán María y ya tenía 11,000 suscriptores y de ahí estuve sin hacer videos hasta casi finales de enero. Entonces empecé de nuevo a trabajar duro, a subir cuatro videos a la semana. Yo lo hago todo, grabo, edito… y me enfoqué, dije: voy a hacer esto porque me gusta, me apasiona, la paso bien y puedo generar una fuente de ingresos y en la medida en que mi capacidad de influenciar crezca puedo llevar un mensaje chévere. Hago videos que pueden ser cómicos o de comida, pero si los ves todos, no importa lo que haga, en algún momento hay un mensaje positivo. Entiendo que es una manera de no limitarme. Así llevo hasta el día de hoy. Estoy enfocado en el canal y para los videos de comida, ya los restaurantes me pagan para que vaya a hacer un video en el establecimiento. Cuando empecé, yo grababa el video por un intercambio de comida y entonces dije: coño mano, yo veo que gente por ahí hace un video, no hay un personality comiendo, no hay nada, es un video de 30 segundos editado para que la gente ponga un anuncio y le cobran mil pesos. Entonces consulté y dije que iba empezar a cobrar 100 pesos por video para sentirme que me están pagando algo; me dijeron que nadie me iba a pagar. Eso era lo que necesitaba para hacerlo. Cuando los primeros negocios me empezaron a pagar, el efecto de la gente respondiendo a los negocios fue brutal y esos dueños de negocios se comunicaban con sus amigos: mira, pusieron mi video y funcionó. Entonces poco a poco fui subiendo la tarifa pues llegué al punto de que cuatro negocios se quedaron sin comida temprano y ya hay negocios que tienen hamburgers con mi nombre. Un video que hice en San Germán, el tipo me llamó como hora y media después de que salió el video y dije: raro que me está llamando porque usualmente es al otro día que reciben el palo. Me llamó para decirme: te pido perdón por haber regateado el precio porque desde que salió el video la gente empezó a llegar con el celular en la mano a decirme que querían lo que tú te comiste. Como se ha regado la voz ya tengo un grupo de miles de personas que esperan el video de comida que sale todos los sábados para ver a dónde van a ir a comer. Esto se traduce a que si de todas esas personas van 100 y si tú en tu negocio metes 100 personas regularmente… es una locura. Fui a un negocio que era a la orilla de la carretera y que hacen las mejores maicenas y avenas que he probado en mi vida, una cosa increíble, y esa gente abrió dos negocios más después de mi video. GDE: O sea que ahora tú no escoges los restaurantes, ahora te llaman para que vayas a hacer el video. JDJ: Sí, los negocios me llaman, los verifico, los reviews... porque si el negocio no es bueno no lo puedo hacer porque se me daña el grupo de seguidores. GDE: ¿Cuánto tiempo tardas desde el momento en que grabas el video hasta que lo subes al canal? JDJ: Grabo rápido, es la parte más fácil. La parte que más tarda es la idea porque son cuatro a la semana. La edición de un video me puede tomar desde una hora y media hasta seis. GDE: Y no importa el tema del video, siempre hay un mensaje positivo y de motivación… JDJ: Siempre. Por ejemplo, hice uno en un lugar de sushi y cuando la muchacha que entrevisté me dijo que abrían los siete días, dije: se fijan, esta gente trabaja los siete días. Nosotros muchas veces a las cinco menos cuarto estamos en el ponchador esperando a que sean las cinco para irnos; no podemos progresar de esa manera. Siempre voy a llevar un mensaje en cada video para que la gente diga: coño, verdad es. La Ñapita: Descríbete con tres palabras: obstinado, compulsivo y disciplinado Lugar del mundo: Egipto Frase: “Tenemos la responsabilidad de vivir nuestra grandeza o si no sufriremos la condena de ser olvidados.” Coleccionas... experiencias Alguna obsesión o manía: me encantan las mujeres demasiado, es mi punto más débil.¿Te gustaría conocer a? Les Brown, para mí es el mejor motivador del mundo. ¿Qué lees o escuchas al momento? Terminé un libro que se llama YouTube Secrets y tengo al lado El poder de la autodependencia de Jorge Bucay. ¿Qué te inspira? Mi padre Algo placentero para ti es: viajar ¿Cómo se llamaría la película de tu vida? “Un hombre imperfecto” Si existen las vidas pasadas, ¿que fuiste en otra vida? Creo que tuve mucho dinero. Un puertorriqueñ@ que admires: mi padre Quisieras aprender a: ser mago, una persona capaz de lograr que independientemente de la circunstancia a su alrededor, su estado de ánimo no cambia. ¿Cómo te relajas? En mi casa, soy casero, me tiro en la cama, prendo el aire y me quedo ahí o leyendo un libro o haciendo una entrevista como esta… ¿Qué te da esperanza? Cada vez que nace un niño. Creo que no podemos tratar de entender la capacidad de sabiduría infinita de Dios y se me hace totalmente ilógico pensar que el mundo no tiene una capacidad de cambiar y aún así sigue llegando gente. Creo que cada persona que nace es la semilla de un cambio, es quizás la próxima persona que pueda ser un líder que cambie las cosas. Quisieras que te recordaran por: ser un tipo alegre que no se rindió. Sigue a Javier en las redes sociales: YouTube: Javier de Jesús PR Facebook: Javier De Jesús Instagram: javierdejesuspr
4 Comentarios
Asunción Yunqué-Osorio
10/21/2022 08:22:36 pm
Hoy ví el anuncio de la conferencia de motivación de Javier De Jesús, al que siempre he admirado y busqué en Google por su apellido, pues de momento olvidé su nombre.
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Yadira
10/24/2022 08:59:30 am
Gracias por su hermoso mensaje y muchas bendiciones.
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Yadira
10/24/2022 08:58:57 am
Thank you!
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Diciembre 2020
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